Introducción al libro de Rut

Comentario Bíblico / Producido por el Proyecto de la Teología del trabajo

El libro de Ruth cuenta la historia extraordinaria de la fidelidad de Dios para Israel en la vida y el trabajo de tres personas comunes: Noemí, Rut y Booz. En sus labores en medio de la dificultad económica y la prosperidad, vemos la mano de Dios claramente en su trabajo de producción agrícola, en la administración generosa de los recursos para el bien de todos, en el trato respetuoso entre compañeros de trabajo, en la creatividad para enfrentar la necesidad y en la concepción y crianza de los hijos. A lo largo de toda la historia, la fidelidad de Dios hacia ellos crea oportunidades para trabajar de forma fructífera y su fidelidad a Dios trae la bendición de la provisión y la seguridad entre ellos y con el pueblo a su alrededor.

Los eventos del libro de Rut ocurren durante la fiesta de la siega de cebada (Rut 1:22; 2:17, 23; 3:2, 15, 17), en la que se celebraba el vínculo entre la bendición de Dios y el trabajo del ser humano. El origen del festival se encuentra en dos pasajes de la Torá:

Guardarás la fiesta de la siega de los primeros frutos de tus labores, de lo que siembres en el campo. (Éx 23:16; énfasis agregado)

Entonces celebrarás la fiesta de las semanas al Señor tu Dios con el tributo de una ofrenda voluntaria de tu mano, la cual darás según el Señor tu Dios te haya bendecido. Y te alegrarás delante del Señor tu Dios, tú, tu hijo, tu hija, tu siervo, tu sierva, el levita que habita en tus ciudades, y el forastero, el huérfano y la viuda que están en medio de ti, en el lugar donde el Señor tu Dios escoja para poner allí su nombre. Y te acordarás de que tú fuiste esclavo en Egipto; cuídate de guardar estos estatutos. (Dt 16:10–12; énfasis agregado)

Estos pasajes juntos establecen el fundamento teológico para los eventos del libro de Rut.

  1. La bendición de Dios es la fuente de la productividad humana (“según el Señor tu Dios te haya bendecido”).
  2. Dios concede Su bendición de la productividad a través del trabajo humano (“frutos de tus labores”).
  3. Dios demanda que se provean oportunidades para que las personas pobres y vulnerables (“el forastero, el huérfano y la viuda”) trabajen y sean productivos (“te acordarás de que tú fuiste esclavo en Egipto”, es una alusión a la liberación de Dios de Su pueblo cuando eran esclavos en Egipto y Su provisión para ellos en el desierto y en la tierra de Canaán).

En resumen, la productividad del trabajo humano es una extensión del trabajo de Dios en el mundo. Además, la bendición de Dios para el trabajo del ser humano está profundamente ligada al mandato de Dios de proveer generosamente para aquellos que no tienen los medios para sustentarse. Estos principios forman la base de libro de Rut. El libro no es un tratado teológico sino que es un relato, y la historia es fascinante.